La FED hace el resto
Nueva sesión de nerviosismo en las bolsas de todo el mundo, tras el pánico vendedor de ayer, pese a la festividad de Wall Street, hoy todas las miradas estaban puestas en Estados Unidos, lo que ha provocado una nueva apertura de infarto, con medio selectivo suspendido de cotización por la elevada volatilidad reinante en el mercado.
Esta volatilidad ha sido tan exagerada que ha permitido al Ibex35 moverse en un rango cercano a los 1.000 puntos, marcando un nuevo mínimo en 11.955,40 puntos, dentro de la primera hora de contratación, lo que ha provocado un rebote técnico que ha llevado al índice por encima de los 12.600 puntos. Antes del cierre, los ánimos se calmaban y esto permitía al índice recuperar posiciones y marcar un máximo en 12.895,00 puntos.
Durante el resto de la mañana, el Selectivo ha estado salvando la zona de los 12.420 puntos, para recibir un nuevo impulso alcista antes de la apertura de Wall Street, al conocerse la decisión de la FED de rebajar los tipos de interés en tres cuartos de punto, en una medida extraordinaria, que poco después provocaba nuevamente el miedo inversor, al considerar que esta medida es pan para hoy y hambre para mañana.
Con esta rebaja de la FED, el valor del dinero en Estados Unidos se sitúa en el 3,5% desde el 4,25% anterior y pone de manifiesto los graves problemas que atraviesa la economía americana. Esta claro, que las medidas fiscales, unidas a este último recorte de tipos tratan de sacar a flote a una economía que esta herida y que amenaza con entrar en recesión.
En Europa, los inversores estarán ahora pendientes de la decisión que en materia de tipos pueda tomar el BCE en su próxima reunión del mes de Febrero. El circulo se cierra cada vez más y pese a la elevada inflación, todo apunta a que Trichet se va a ver obligado a rebajar tipos antes de la primavera, quedando el problema inflacionista en segundo término, pese a las declaraciones realizadas por la institución europea, que se ha cansado de decir por activa y por pasiva que tomará las medidas que estime oportunas para poner freno a la inflación.
Al cierre, el Ibex35 recupera un 1,69% y cierra en 12.839,70 puntos, lo que ha permitido al índice mantener al cierre el nivel de 12.600 puntos, respetando la tendencia alcista de largo plazo, pero para ello ha hecho falta dar forma a un nuevo soporte, que ahora se sitúa en los 12.000 puntos.
La rebaja de tipos por parte de la FED, pasa factura al Dólar, que cae con fuerza frente al Euro y se cambia a 1,4613 unidades.
Lo más reseñables a estas alturas de la película son las contrariedades observadas en la gran mayoría de analistas, que pronosticaban hace apenas unas semanas que el mercado podría revalorizar por encima del 10% en el ejercicio 2008, para pasar ahora a indicar que se ha producido un cambio de tendencia y que pese a la existencia de rebotes, el objetivo del Ibex pasa ahora por caídas hasta los 10.700 puntos.
Esta claro que no es un momento para lanzar las campanas al vuelo, pero tampoco para poder hablar con propiedad de lo que pueda suceder en los próximos meses, ya que con la gran volatilidad que flota en el entorno, la irracionalidad domina la ejecución de ordenes de compra y venta, por lo que solo cuando el mercado vuelva a la normalidad podremos analizar con detenimiento los efectos de esta caída y cuales pueden ser los objetivos para un futuro.
En el Mercado de Materias Primas, el barril de Brent cerró al alza con un repunte del 0,3% hasta 87,80 dólares, mientras que el barril West Texas cotiza a la baja con un retroceso del 1% hasta 89,79 dólares.
Dentro del Ibex35, solo cuatro valores acabaron en números rojos (ACS, Iberdrola, Sacyr Vallehermoso y Unión Fenosa), mientras que el resto de valores lograron marcar suelo y recuperarse de los últimos batacazos recibidos.
A este respecto, Banco Santander ha generado nuevo soporte en 10,50 euros, zona en la que las ordenes de compra han hecho cola para entrar. Al cierre, los títulos de la entidad presidida por Emilio Botín, recuperan un 4,6% hasta 11,84 euros, con un elevado volumen de negociación que ha permitido a los inversores cambiar de manos un total de 151.600.058 títulos.
Peor lo ha pasado Bankinter, que durante la sesión ha perdido la cota de los 10 euros, llegando a marcar mínimo en 9,20 euros. Al cierre, los títulos de la entidad solo han conseguido recuperar un 0,3% hasta 10,05 euros con un total de 5.567.432 títulos negociados, quedando así valorada por debajo de los 4.000 millones de euros.
Grifols ha vivido una jornada de auténtica locura, llegando a marcar un mínimo durante la primera hora de negociación en 12,83 euros, para vivir varias subastas de volatilidad y recuperar al cierre un 3,3% hasta 14,61 euros con un total de 2.649.594 títulos negociados. Gracias a este cierre, Grifols cierra en 3.113 millones de euros, cuando por momentos llego a caer por debajo de los 3.000 millones.
Telefónica vivió hoy una jornada de más presión vendedora que en días anteriores, así mientras el resto del mercado se recuperaba de los descensos, la operadora le costaba trabajo recuperar el pulso comprador. La clave en este caso se encontraba en el cierre del hueco alcista generado en el día del Inversor. Este hueco ha sido cancelado hoy y esto ha provocado que los inversores se mantuvieran apartados de la operadora, al ponerse fin al impulso alcista con origen en el mes de Octubre del pasado año. La gran volatilidad del mercado ha permitido que la operadora marque un mínimo en 18,87 euros, mientras que su máximo ha estado en 20,25 euros. Dentro de lo positivo esta el cierre del fuerte hueco bajista originado en la apertura de hoy, pero entre lo malo, sigue vigente el hueco bajista de la jornada de ayer, en la zona de 21,40 euros. Al cierre, Telefónica suma un 0,4% hasta 20,13 euros con 80.836.723 títulos negociados.
En el Mercado Continuo, mientras algunos valores luchan por no perder la tendencia alcista principal, otros dejando bien claro de principio a fin cual es su camino. Así que Astroc sigue a lo suyo y no encuentra motivos para recuperar terreno, cediendo al cierre un 6,8% hasta 2,20 euros con un total de 1.081.922 títulos negociados. A este ritmo, el valor va a ser objeto de una OPA nada más fusionarse con Landscape y Rayet.
Corporación Dermoestética también vivió una jornada de pánico vendedor, que provocó que sus títulos cayesen hasta un mínimo de 5,50 euros, lo que constituye un nuevo suelo para el valor. Al cierre, la compañía de cirugía estética modera las caídas y acaba en 6,24 euros (-1,1%) con un total de 178.907 títulos negociados.
El holding de participaciones industriales de La Caixa, bautizado como Criteria Caixa Corp, cierra con una subida del 0,9% hasta 4,29 euros, con un total de 5.941.396 títulos negociados en una banda de precios que ha oscilado entre 3,73-4,34 euros. El volumen en Criteria se ha disparado en las últimas sesiones, lo que unido a la resistencia que la acción puede encontrar en la zona de 4,60 euros, dificultan sus avances en caso de rebote del mercado.
Iberdrola Renovables salva los muebles en el último segundo y logra cerrar en tablas (4,45 euros), en una jornada en la que los brokers han salido a defender el valor, quizá siguiendo instrucciones (Morgan, JP Morgan, Ibersecurities, Santander). Por ahora, Renovable marca un nuevo suelo en 3,90 euros, negociando durante la sesión un total de 17.338.350 títulos.
La cadena hotelera Sol Melia, como el resto del mercado también marca un nuevo suelo a vigilar (7,85 euros), zona esta, desde la cual rebota y logra acabar la jornada con una subida del 7,1% hasta 8,88 euros con un total de 1.841.329 títulos negociados.
Para finalizar, Vértice 360 grados acaba con una caída del 1,9% hasta 1,59 euros, después de moverse en un rango de precios que ha oscilado entre 1,35-1,64 euros, con un total de 498.853 títulos.
Bajo este panorama, es importante vigilar los huecos a la baja que han dejado algunos valores de primera fila, de cara a ver si son capaces de cerrarlos y recuperar la senda positiva, o si bien, la posible recuperación pierde fuerza cuando se acerquen al cierre de dichos huecos.
En estos momentos: PRECAUCION. Aun nos quedan por vivir más descensos y algún que otro posible rebote.